'Sabemos vivir felices con victorias y sin victorias'

 

'Sabemos vivir felices con victorias y sin victorias'

Jon Salsamendi ha vuelto a colocar a Urdaibai en una situación privilegiada para optar a la Bandera de La Concha. A pesar de rozar el récord, se muestra muy cauto

NOTICIAS DE GUIPúZCOA - (Aner Gondra David de Haro).-Al oriotarra Jon Salsamendi los diez segundos de renta con los que cuenta Urdaibai no le alteran el pulso. Ni siquiera haber estado muy cerca de romper un récord histórico. Dice que lo sucedido en la edición de 2013 es agua pasada, pero por si acaso en los prolegómenos de la regata de este año no repite nada de lo que hizo hace un año.

¿Su mensaje de ‘todavía no hemos ganado nada’ ha servido para contener la euforia del equipo?

-El equipo no tiene ahora mismo ninguna euforia. En absoluto. El equipo antes de salir del agua el domingo tenía muy clara esa frase, que no hemos ganado nada. Si lo sabían el domingo, te puedes imaginar el lunes entrenando. El lunes entrenamos en Bermeo y lo que estamos intentado es que el próximo domingo intentemos ser mejores que el domingo pasado. Para ello hay que trabajar bien todos los días, con los pies en el suelo y asumiendo las realidades tal y como son. El domingo salimos del agua muy contentos porque pudimos hacer la regata que queríamos y con ello ver que éramos los mejores. Eso es lo que nos da confianza. Vemos que, si volvemos a hacer lo mismo, tenemos muchas posibilidades de volver a ser los mejores o, por lo menos, tenemos una conciencia de que dependemos de nosotros mismos. Pero tenemos muy claro lo primero: que no hemos ganado nada y además no es un tópico. Es una realidad. Independientemente de que la historia diga que diez segundos son remontables o no, bastante experiencia y escarmiento tenemos dentro del agua y fuera del agua como para saber que hasta que te den la bandera en el barco no la has ganado.

¿Los diez segundos son una red de protección o les mete más presión al poder escaparse la bandera tras tener una ventaja?

-Está claro que para el que está por detrás la táctica es clara. Solo le queda el ataque, ataque y ataque, le salga bien o no. No tiene nada que perder. El que está como nosotros tiene más que perder, pero nunca se sabe si hay que salir a defenderse o a atacar. Algunos dicen que la mejor defensa es un buen ataque. El tema es que tácticamente hablando, todo dependerá del día D y de la hora H. De qué circunstancias de mar tenemos, de cómo va el sorteo de calles. Nosotros ahora mismo no nos cambia la cosa. Solo queremos intentar ser mejores que el domingo pasado. Si este domingo ya hemos sido los mejores, ¿por qué no vamos a volver a serlo el domingo que viene? Que luego esos diez segundos sirvan de colchón, o que la gestión de esos diez segundos sirvan para salir de algún apuro, solo puedes pensarlo metido en la regata. A priori, en nuestro planteamiento esos diez segundos no intervienen al planificar lo que queremos hacer en la regata.

¿Será cuestión de sangre fría no precipitarse al intentar seguir los ataques indiscriminados de Kaiku y Hondarribia o están obligados a seguir el ritmo de quien quiera reventar la regata?

-Lo de la sangre fría es fácil desde tierra, pero en el agua no es tan fácil. Nosotros tenemos claro que los cuatro equipos de la tanda de honor, y estoy seguro de que los de la primera tanda también, tienen nivel suficiente o tienen motivos para ganar la tanda.

¿Le preocupa que haya oleaje?

-Evidentemente, cuando uno está en la situación que estamos nosotros, siempre prefiere que la mar esté en calma. Cuanto mejor esté la mar, normalmente, a no ser que alguien falle estrepitosamente, las diferencias suelen ser pequeñas. Y a nosotros nos interesan que las diferencias sean pequeñas y, si son grandes, que sean a favor nuestro. Lo normal es pedir que no se mueva mucho ni la mar ni el viento. Además, yo soy un entrenador, y cuando he sido remero he sido igual, que nunca me ha gustado pedir mar. No ha sido por no saber desenvolverte en la mar, sino porque le tengo muchísimo respeto a la mar y siempre me ha parecido una osadía pedir que se mueva la mar. La mar nos pone en su sitio a todos, la mar es la reina y lo que disponga nosotros no tenemos que atener a ello. Lo que sí sé es que normalmente todos los equipos que estamos siempre nos hemos desenvuelto muy bien en mala mar y este equipo que tengo ahora se desenvuelve mejor que muy bien. Aun así, jamás pediré yo que se mueva la mar.

En la Liga y en los campeonatos ha tenido la habilidad de hacer partícipe de los triunfos a toda la plantilla. ¿Va a aplicar también las rotaciones en La Concha o apuesta por el trece del domingo?

-Hubo una rotación de jueves a domingo, pero la idea es dar continuidad a los que remaron el domingo porque lo último que puede hacer un equipo a estos niveles depende de la tranquilidad del remero y de su confianza sabiendo desde días anteriores que va a remar, siempre y cuando la salud le acompañe y no pase ninguna desgracia. La propia tranquilidad mental del remero, la confianza que adquiere y el desarrollo de siete u ocho entrenamientos seguidos sin tocar nada, siempre da un último empujoncito al equipo que creo que va a ser necesario este domingo.

Tanto usted como el presidente del club coincidieron en alabar a Gorka Aranberri. ¿Le han visto tocado en algún momento por lo del año pasado o por las críticas?

-No, en absoluto. No ha recibido ninguna crítica por regatas de este año. Hubo un amago de crítica en la Bandera de Zarautz, pero no era al patrón sino al entrenador. Como todos vimos el primer día que no era una crítica, sino una película, la verdad es que no le hemos dado ninguna importancia ni se la daremos. No hay motivos para criticar al patrón. Es obvio que el domingo hizo una gran regata y cuando se hace un buen trabajo se dice y cuando no se hace tan bueno también se dice y no pasa nada. Lo que pasó el año pasado, pasado está. Tenemos muy claro en el equipo que agua pasada no mueve molinos y miramos para delante. No miramos circunstancias que no aportan nada. El domingo salió muy bien. Ya terminó y ahora vamos a buscar que nos salga bien ocupándonos de lo nuestro y de nada más.

Tras lo de Zarautz, José Luis Korta dijo que usted es el rey de los abordajes. ¿Algo que replicar al respecto?

-Yo nunca me he metido con José Luis Korta y nunca lo haré. Yo sé quién es él y él sabe quién soy yo. Todo lo que dijo de mí es mentira y él lo sabe. No tengo nada más que decir.

¿Necesita Urdaibai esta bandera más que nunca después de lo sucedido en 2013 y la sanción de la Liga?

-Urdaibai no necesita nada. Urdaibai es un equipo de remo que, como todos los equipos, aspira el máximo de regatas posible. Nosotros siempre que estemos en disposición de poder intentar ganar una regata, como todos los equipos, lo intentaremos. Tenemos una buena oportunidad de ganar, si no la mejor regata, una de las mejores, y es en lo que nos centramos. Pero no tenemos ninguna necesidad de nada. Somos deportistas de competición e intentamos ganar al que está al costado. Tenemos ahora una gran oportunidad en el mejor escenario y es así como pensamos. No tenemos ninguna necesidad. Sabemos vivir tranquilos, vivir en paz, y sabemos vivir felices con victorias y sin victorias. Es una circunstancia deportiva que empieza y termina en el agua. Los componentes de este equipo, desde el entrenador hasta los remeros, y todos los participantes de este proyecto... la felicidad de ninguno de nosotros está supeditada a una victoria o no victoria en una competición. Buscamos la victoria y nos hace felices la victoria. Pero desde que salimos del agua ahí se queda todo. Necesidad es una palabra muy fuerte. Lo nuestro es una ambición, una ilusión y un estímulo deportivo. Más allá de eso, nosotros sabemos vivir tranquilos y felices con lo que cada uno tiene sin la necesidad de tener que agarrarse como sea a una victoria en una regata.

¿Lo de 2013 ha cambiado su manera de ver o valorar La Concha?

-No. Para mí agua pasada no mueve molinos. En 2013, como entrenador y como equipo, cumplimos con lo que había que hacer. Los dos domingos fuimos la trainera más rápida y otro tipo de circunstancias hicieron que, después de una impugnación, los jueces decidieron dar la bandera a otro equipo. A día de hoy, hay que reconocerle como ganador y punto final. Nosotros no miramos atrás y queremos ganar esta regata y cualquier otra regata que tengamos que remar en el futuro.

¿Le sorprendió estar cerca del récord o contaba con que el equipo podía dar ese rendimiento?

No me sorprendió y prueba de ello es que hace cinco semanas, después de que terminó el Campeonato de España, les expliqué un poco la preparación que íbamos a llevar en cinco semanas y les dije que, como reto de entrenador, me planteaba llevar el equipo a niveles de récord porque me daba la sensación de que, siempre y cuando la mar diera esa oportunidad, el ganador iba a estar si no en récord, sí muy cerca. No es que yo sea un visionario, sino que este año ya se han roto varios récords. La semana pasada en Portugalete, en marea alta, con viento y corriente de bastante fuerza, los equipos bajaron de 19:10 en tanda de honor. Eso es una barbaridad. Fue una muestra del potencial que hay. Siempre y cuando la mar diera esa oportunidad, creía que el ganador iba a estar muy cerca del récord. Este domingo las condiciones han sido muy favorables tanto para fuera como para dentro. Quizás el viento no era el mejor, pero no vamos a pedir todo. S...[leer más]