Valeria Palma, un prodigio forjado en casa
Dos títulos nacionales y un subcampeonato avalan a esta linense de 16 años que va camino de la selección y que se entrena cada día en el salón de su domicilio

EUROPASUR - Valeria Palma rompió hace poco más de un año con la sección de remo del Club Marítimo Linense, en la que se había forjado, y se enroló en el Club Náutico de Sevilla tras media docena de meses en el dique seco. 'Decidí cambiar porque entendía que eramejor para mí', dice la remera, que evita por todos los medios que surja cualquier atisbo de polémica por esa decisión. aleria Palma es una de esas linenses de la que sus paisanos tienen sobrados motivos para sentirse muy orgullosos. Con apenas dieciséis años en los últimos meses ha logrado dos títulos y un subcampeonato de España de categoría juvenil en diferentes modalidades de su deporte, el remo. Todo eso, a pesar de que es obligada protagonista de una imagen insólita, ya que lleva a cabo la mayor parte de sus entrenamientos dentro de su propia casa y de que obtiene unas notas excelentes en sus estudios de primero de Bachillerato en el Instituto Mar de Poniente y no se sabe muy bien de dónde saca el tiempo para, además, manejar de manera realmente prodigiosa violonchelo y clarinete.
Este indiscutible valor consiguió en octubre de 2013 subirse a lo más alto del podio en el campeonato nacional de yolas y durante el pasado fin de semana se colgó la medalla de plata en la modalidad de ergómetro y la de oro en fondo, lo que la convierte en una de las más firmes candidatas a incorporarse al equipo nacional, siempre dentro de su categoría,
Valeria Palma rompió hace poco más de un año con la sección de remo del Club Marítimo Linense, en la que se había forjado, y se enroló en el Club Náutico de Sevilla tras media docena de meses en el dique seco. 'Decidí cambiar porque entendía que era mejor para mí', dice la remera, que evita por todos los medios que surja cualquier atisbo de polémica por esa decisión.
'Me entreno sola en La Línea, de acuerdo al programa que me elaboran los técnicos de mi equipo', detalla. 'Unas veces voy al gimnasio y otras, cuando me corresponde trabajar con el ergómetro, pues en casa y los viernes viajo a Sevilla para estar el fin de semana con el equipo ya sea para entrenarme o para tomar parte en las competiciones', explica Valeria Palma, que en 2012 tuvo el privilegio de recibir el premio a la mejor deportista local del año precedente junto al regatista olímpico Rafa Trujillo.
'La verdad es que resulta mucho más duro trabajar sola que hacerlo con el grupo', confiesa. 'De hecho durante las vacaciones de Navidad me fui a Sevilla y estuve trabajando con mis compañeros y cuando volví a la rutina resultó dificilísimo entrar en la dinámica de volver a hacerlo sin nadie a tu lado'.
'De todas formas este es un deporte que ya de por sí exige muchísimo sacrificio: hay que levantarse muy temprano porque es cuando mejor está el agua y es necesario que seamos muy constantes, mucha dedicación', puntualiza.
'De momento me las ingenio para poder llevar el deporte y los estudios, aunque para eso muchas veces me tengo que llevar los apuntes e ir estudiando en el autobús, que es la única forma de poder aprovechar al máximo el fin de semana', comenta.
El próximo compromiso competitivo está fijado para el próximo mes de marzo, una cita clave para determinar qué remeras serán integradas en la selección nacional. 'De acuerdo a los resultados voy bien encaminada, pero no me puedo confiar porque ahora es cuando todo el mundo aprieta para poder entrar, así que mi idea es trabajar aún más', señala Valeria Palma, que paradójicamente aún no ha formado siquiera parte de un combinado autonómico.
Valeria Palma rompió hace poco más de un año con la sección de remo del Club Marítimo Linense, en la que se había forjado, y se enroló en el Club Náutico de Sevilla tras media docena de meses en el dique seco. 'Decidí cambiar porque entendía que era mejor para mí', dice la remera, que evita por todos los medios que surja cualquier atisbo de polémica por esa decisión.
'De todas formas este es un deporte que ya de por sí exige muchísimo sacrificio: hay que levantarse muy temprano porque es cuando mejor está el agua y es necesario que seamos muy constantes, mucha dedicación', puntualiza.
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